jueves, 22 de abril de 2010

MEMORIAS 2

LOS BUENOS AMIGOS
El Lunes siguiente concedimos en el comedor del hospital, yo ya estaba en la mesa comiendo cuando llaga ella, toda sonriente como nada, para ella había sido todo un juego, para mi, una bofetada en las dos mejillas, le pregunte por el tal Genaro, me dice que es su compañero, me pongo un poco furioso, ella se ríe, le pregunto si veía todo bien lo que hiciera, ella me dice que si, que aquello solía pasar muchas veces, yo le dije que la mía sería la ultima, ella trataba de apaciguar la fiesta, pero yo le dije hasta aquí llego nuestro juego. Ella seguía con su trabajo, y yo le ayudaba a meter el carro en el ascensor y nada más, la maquina fliper se quedo sola sin aquella pareja que se amaban en la oscuridad, y cuando llego la claridad, el amor se rompió.

En la redacción de la breche, conocí a un compañero de la Liga Luis, trabajaba de profesor en la Fraternite, estaba con asilo político, ya hacia años por pertenecer al movimiento obrero en Zaragoza, un poco a su manera, pero buen compañero, el nos enseño como funcionaban las famosas fotocopiadoras chinas a manivela donde hacíamos las otavillas y la revista El Rojo, un suplemento de La Breche. Aprendimos a hacer las placas para la imprenta con sus fotografías en offset.
Aunque esta imprenta estaba legal, estaba prohibido hacer estas otavillas, pero nosotros, las hacíamos, y mismo la policía lo sabia, cuando hacían la ronda, nos metíamos en un cuarto secreto en el sótano.
Para nosotros la libertad de pasar la frontera tranquilos ya no estaba al día, muchas fotografías en la prensa con nuestras caras al descubierto en las manifestaciones, y no estabamos interesados en entrar en las cárceles de los terroristas del estado Español.

Año nuevo 1975, al salir del trabajo las tres de la tarde 7 de Enero, ya hacía unos meses que no veía a Marija, ella también venía de trabajar del hospital, hablamos del trabajo del asunto que venían trayendo las enfermeras del hospital Bourget, tenían a dos compañeras despedidas por asuntos sindicales en el trabajo, ella no ponía gran interés en el asunto, yo cambié de tema y le dije de ir a tomar un café, ella acepto, le pregunte si lo que decían de ella era verdad, sobre lo de la información a los jefes sobre sus compañeras de trabajo, ella me juró que no, y decía que eso eran chismes de algunas enfermeras de su país del Corsovo, que no tenían las mismas ideas sobre la independencia de esta región de Yugoslavia, y también no era muy amiga de Tito. Yo la escuchaba y solo le respondía cuando hablaba algo de lo que yo estaba de acuerdo, ya que políticamente no decía nada a mi favor, pero yo la escuchaba igual, se dieron las siete de la tarde y nosotros aun continuábamos tomando grapa que ya nos salía por los ojos, yo me encontraba un poco mejor que ella, le dije de marcharnos para casa, ella no quería, yo no quería dejarla sola en aquella forma que se encontraba, le ayude a coger el autobús en la place de la Riponne, ella vivía en Chally, cuando llegamos a su casa, le ayude como pude ya que yo también tenía bastante a meterse en la cama, serian las 9 de la noche, yo pensaba en marcharme, pero como, en aquellas condiciones no podía andar por la calle, decidí quedarme a dormir en su casa, ella perecía que estaba muerta, cerré la puerta con llave y pasador por si alguien tenía llave me acosté en otra cama que tenía en otra habitación y tambien con llave, yo hacía caso a lo que me contaran sus compañeras de trabajo, y por si acaso, con toda mi borrachera protegido estaría mejor.
Me quedé dormido pronto, y serian las cuatro de la mañana y siento un ruido que venía del cuarto de baño, por el ruido que hacia la cisterna, no hice caso, y al momento siento andar en la manilla de la puerta, ella sabia que estaba dentro ya que dejara fuera en el salón una gabardina, me llamo y yo le conteste, y me dice si estoy cómodo y que abriera que estaba sola, y me dice que soy un miedoso, le abrí la puerta y entra aun dando unos pequeños balanceos, yo me río, ella me hecha la culpa de estar así, y yo le digo que la culpa la a tenido la poma y la cerveza, ella se ríe, me dice que le duele mucho la cabeza, yo le digo que se acueste que le pondré unos paños de agua fría en la cabeza, ella no quiere, la dejo sola en la aviación. Serian las cinco y a las siete tenía que empezar a trabajar, me quedaba una hora para despejarme un poco, y así lo hice metiéndome en la ducha en agua mas bien fría. Ella tambien trabajaba, comenzaba alas 10 de la mañana. Cuando estoy cerrando la puerta para marcharme, me llama, y me dice que al medio día nos tenemos que ver, yo le digo que bueno pero en mi casa en el chemin du Calvaire numero 9, ella me dice bueno.

Cuando estaba comiendo al medio día en el comedor del hospital, ya sabían más que yo, o se lo figuraban, por que lo que decían no pasara nada, aun no terminara de comer cuando llega ella y dos compañeras de trabajo, yo tenía que marcharme, tenía cita con Tere la compañera de Luis, tambien enfermera en el hospital cantonal. Cuando llegue a casa, tenía más ganas de acostarme que de visitas, me tiré en la cama y cuando estaba ya frito en sueños llaman a la puerta unas dos veces, me levanto y miro por la mirilla de la puerta, y es Tere, ¡¡ abro la puerta, o no la obro!!, pensé. Le pregunto que es lo que quiere, y me dice que es sobre Luis, y me pregunta si es cierto que sale con otra, o otras, yo le digo que no sé, pero cuando estoy con el, el está solo o con compañeros, ella me dice que es mentira, por que unas amigas le han dicho que estuvieran con él, yo le dije que los celos son malos para el cerebro, y si eso era cierto el mundo esta lleno de hombres libres de pareja, cuando termino de decirme tonterías, le dije que si me acompañaba hacer las compras a la migros de la Riponne, ella dice que tambien tiene que hacer las compras ella. Cogimos el bús en el túnel junto al hotel de la police, y me pregunta por donde suele andar Luis, yo le digo que pienso que ella sabe mejor que yo los rincones que él suele escoger para pasarlo bien con todas sus alumnas, ella se enfada y me manda a un sitio, sois todos iguales? Mira Tere, trata de calmarte, el compañero Luis ya sabes como es no quiere estar solo con una, el esta casado y tiene hijos, tu lo sabes, el ya no engaña a nadie le gusta pasarlo lo mejor que puede, ya que no puede estar con ellos en España, ni con sus familiares por culpa de la maldita dictadura que nos tiene separados de nuestra tierra, y ya sabes que si esto no ocurriera él no estaría aquí, esta perseguido. Bueno que hacemos después de hacer las compras, si quieres hacemos la cena en mi casa, cenamos y salimos al cine, echan una buena película en el cine del gran pont, y espero que dejes de pensar en tus tonterías amorosas con ese hombre que pasa de ti.

Antes de entrar en el cine, fuimos a tomar un café que buena falta me hacia, aun tenía la resaca del día anterior y esperaba no tomar más alcohol. Mientras pasaba la película ella me miraba, yo hacia lo mismo, sin entrar en el mundo del manoseo de las salas de cine, aun nuestros encuentros no habían sido tan frecuentes para conocernos y pasar la meta que nos separaba, parecíamos que aun desconfiábamos uno del otro, y así paso la película.

Hacia unas semanas que yo estaba un poco aquejado de la espalda, ya que cogiera un peso en el trabajo algo pesado, le ayude a levantar un carro de reparto de comida por las habitaciones a un compañero del lavandero de platos y otros enseres pequeños, y ellos eran los que limpiaban estos carros. Fui al médico del personal del hospital, le pedí unos días de descanso, donde el dijo que si, me dio quince días de baja laboral.

Mañana Sábado, a la mañana me levanto, serian las 9, y después de desayunar cogí el tren rumbo a Echandens, donde hacia ya algunos meses que no estuviera con mis vecinos de Corme, por aquellos entonces en la barraca serian unos siete u ocho del mismo pueblo, cuando llegue algunos aun no estaban en casa donde estaban haciendo las compras en Bussigny o en Renens, cuando llegaron, yo estaba junto a Filipino en la cantina de la barraca, me invitaron a comer, donde acepté. Hicimos carne a la brasa todos juntos que seriamos unas diez personas y todos de Corme. Al terminar de comer, los compañeros fueron a descansar una hora. Cuando se levantaron nos preguntamos a donde podíamos pasar la tarde noche, unos decían al cine, otros a tomar unos cubatas al puerto de Ouchy ya que ellos conocían algo en el castillo. Cuando llegamos a la puerta, el portero no dejaba entrar a un compañero ya que llevaba unos tenis como calzado, y estaba prohibido la entrada con este calzado. Yo conocía al portero, pero era imposible entrar sin zapatos lustrados, el portero me dice que entremos los demás, yo le digo o todos o ninguno, nos marchamos en busca del calzado para el compañero, ya fuera, tratamos de arreglar el asunto, Luis y Antonio calzaban con el mismo numero, uno tenía los tenis y el otro unos bonitos zapatos todo brillantes que mismo reflejaba la luna como si fuera contra un espejo, se sacan cada uno una prenda del calzado quedando con un zapato y un tenis, yo pensaba que cuando llegásemos a la puerta seriamos puestos de patitas en la calle, pero no se como harían que el portero ni cuenta se a dado ellos entraron con el pie que tenían el zapato por delante, y entre la gente que entraba junto a ellos pasaron así, el portero me dice que si fueran a casa a por los zapatos, y yo le digo que pienso que si, ya dentro pusieron cada uno lo suyo ya que parecían un circo a dos. Pasamos la noche de maravilla, serian las cuatro cuando marchamos para casa, unos para Ginebra otros para las barracas y dos vinieron conmigo para mi casa,, donde se quedaron a dormir.

MEMORIAS